Balada Triste de Trompeta... Una cosa si es verdad, es "triste"

Después de ver como Balada Triste de Trompeta se convierte en la favorita para los Goya, con 15 nominaciones, hice acopio de voluntad y me dirigí al cine para poder analizar esta "cosa" en teoría tan rompedora, su director Alex de la Iglesia se inspira en las producciones de Tarantino (cosa que queda clara desde los primeros minutos de visionado.)

De la Iglesia se olvida de la trama, le pese a quien le pese esta "Balada" carece de argumento, por contra si están presentes la sangre, el sexo y lo absurdo, que se unen para crear un festival gore y macabro, donde nada tiene sentido y todo el mundo parece estar loco.

La trama se centra en la figura de dos payasos, de los cuales uno de ellos parece tener serios trastornos de personalidad además de con el alcohol, mientras que el otro más tímido pasará por un proceso de transmutación animal convirtiéndose en una "bestia", la película trata de reflejar la cara más dura y amarga en época de postguerra y ya con Franco debilitándose, donde el eje principal girara entorno a estos dos payasos y a una disputa por la mujer del alcohólico que es un poco ninfómana, lo que nos da una pista del porqué de este conflicto.

Este "circo" concluye en un acto final previsible y poco innovador, las sensaciones que tuve al salir del cine fueron de haber visto otra españolada más, que no va a tener mucha acogida fuera de nuestras fronteras, solamente me confirma la patética situación que atraviesa el cine español, una pena.

Cristian Dorado Dos Santos